La gestión de residuos es un tema de gran importancia en la actualidad, ya que el aumento de la población y el consumo ha generado una gran cantidad de residuos, por ejemplo, en México se estima la generación de 120,000 toneladas diarias, que deben ser tratadas adecuadamente para proteger el medioambiente y la salud de las personas; siendo un aparte esencial de ello el cumplimiento de la normatividad que regula dichas actividades, y en este artículo, te hablemos de la Ley General de Residuos y otras normas relacionadas.
Ley General de Residuos
La Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos es una normativa que establece las disposiciones generales para un manejo óptimo de los residuos en México. Fue publicada en el Diario Oficial de la Federación en 2003 y ha sido modificada en varias ocasiones desde entonces; tiene como objetivo principal promover la reducción, reutilización, reciclaje y tratamiento adecuado de los residuos.
¿Quién debe de cumplir con la Ley General de Residuos?
La ley puntualiza que existe una responsabilidad conjunta entre los generadores, consumidores, empresas prestadoras de servicio y de las autoridades gubernamentales para lograr un manejo de los residuos:
- Económicamente factible
- Ambientalmente eficiente
- Tecnológicamente viable
Con este objetivo, en la ley se hace una división precisa sobre los tipos de residuos y el plan de manejo más adecuado para los mismos.
Clasificación de residuos de acuerdo con la Ley General de Residuos
A grandes rasgos, la Ley General de Residuos clasifica los residuos de la siguiente manera:
Residuos Sólidos Urbanos
Comprende todos los residuos generados a partir de actividades domésticas y sus envases; también se considera dentro de esta clasificación a los residuos que se recolectan en establecimientos y vía pública, siempre y cuando compartan similitudes.
Para eficientar su manejo, los residuos sólidos urbanos se dividen en orgánicos e inorgánicos.
Residuos de manejo especial
Se trata de los residuos que se originan a partir de procesos productivos y que no pueden agruparse dentro de los Sólidos Urbanos ni peligrosos por sus características, o que son producidos por grandes generadores —que producen 10 toneladas brutas o más al año— de Residuos Sólidos Urbanos.
Dentro de esta categoría se encuentran:
- Neumáticos usados.
- Los que provienen de actividades agrícolas, forestales, avícolas, pesqueras, silvícolas y ganaderas.
- Originados en la demolición, construcción y mantenimiento.
- Lodos generados durante el tratamiento de aguas residuales.
- Residuos de tiendas departamentales y centros comerciales.
- Los que se producen por actividades relacionadas con el transporte y desde sitios como aeropuertos, terminales, puertos y aduanas.
- Generados en la prestación de servicios de salud y en centros de investigación de esta misma rama, siempre y cuando, no sean biológicos infecciosos.
- Pilas que contengan sustancias como litio, manganeso, plomo, zinc, mercurio, cadmio o níquel: dentro de los parámetros para no ser considerados residuos peligrosos.
- Residuos provenientes del sector informático, producción de aparatos electrónicos y de automotores.
Residuos peligrosos
Los residuos dentro de esta categoría o sus embalajes, contenedores, envases y suelos con los que hayan tenido contacto, muestran alguna de estas características:
- Corrosivos
- Reactivo
- Explosivos
- Tóxicos
- Contienen agentes infecciosos
En cuanto a su división y formas de identificación de los residuos peligrosos, la NOM-052-SEMARNAT-2005 establece las bases para ello.
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Condiciones generales del manejo de los residuos
La Ley General de Residuos establece las bases generales para la elaboración de planes de manejo y puntualiza las condiciones con las que deben tener los residuos para que sean sometidos a los procedimientos necesarios para lograrlo:
- Sus materiales tienen un elevado valor económico.
- Poseen sustancias bioacomulables y tóxicas persistentes.
- Representen un alto riesgo ambiental, para las personas y la existencia de recursos naturales.
- Son generados en grandes cantidades por un número reducido de sectores.
De igual manera, señala los objetivos y fines que deben de tener los planes de manejo de residuos, principalmente:
- Incentivar la valorización y reducción de la generación de residuos por medio de acciones que reduzcan los costos, hagan más eficientes y sencillos los procedimientos necesarios para su manejo integral.
- Ligado con el punto anterior, impulsar la innovación tecnológica y de procesos para gestión de residuos mucho más factible en el ambiente económico.
- Cubrir los requerimientos de cada clase de residuos y de sus generadores.
Responsabilidades de los generadores de residuos
La ley también establece las responsabilidades de los generadores de residuos, es decir, las personas o empresas que los producen. Estas responsabilidades incluyen la separación y clasificación adecuada de los residuos, su almacenamiento temporal, su transporte y su disposición final en lugares autorizados.
Los generadores de residuos peligrosos tienen responsabilidades adicionales, como la obtención de un registro ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Conoce otras normas relacionadas con el manejo de residuos
Además de la Ley General de Residuos, existen otras normas que regulan la gestión de residuos en México. Las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) son regulaciones técnicas que establecen los requisitos mínimos para garantizar la protección del medioambiente y la salud de las personas. Algunas de las NOM relacionadas con la gestión de residuos son:
Establece las características de los residuos peligrosos y los límites que deben cumplir para ser considerados como tales.
Establece los criterios para la clasificación y especificaciones de los residuos de manejo especial.
Establece los requisitos para la gestión de residuos de manejo especial generados en establecimientos de servicios de salud.
Es un instrumento de política pública que establece las estrategias y acciones para la prevención y gestión adecuada de los residuos en México. Este programa es coordinado por la SEMARNAT y tiene como objetivo principal reducir la generación de residuos, promover su reutilización y reciclaje, y garantizar su disposición final adecuada.
¿Cómo cumplir con la Ley General de Residuos y otras normas oficiales relacionadas con su manejo?
Como puedes ver, el cumplimiento de estas normativas facilita la protección del ambiente, la salud de las personas y que las empresas busquen la innovación constante para que se vuelvan más sostenibles y rentables.
Para lograrlo, es fundamental contactar con un aliado experto en el desarrollo de planes de manejo de residuos eficientes y que cuente con tecnología avanzada que haga estos procedimientos viables y factibles.
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- Desarrollo de un plan de gestión de residuos integral que cubre:
- Recuperación y recolección
- Transporte
- Valorización
- Disposición final o eliminación
- Manejando un abanico amplio para:
- Gestión de residuos no peligrosos
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- Gestión de residuos peligrosos
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Conocer la Ley General de Residuos y otras normas relacionadas con su gestión es fundamental para garantizar una adecuada gestión de los residuos y proteger el medioambiente y la salud de las personas.
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